Querido mío, te digo ya de entrada que sé que eres nuevo en la oficina pero que mi intención es que nos llevemos bien.
En lo de empezar el año con buen o mal pie no vamos a entrar, la verdad, que está muy visto y a veces la cuestión tiene poca gracia. Pero estás aquí y yo, al menos a ratos, quiero pensarte bonito.
Hola, 2023. Sé bueno. Qué te cuesta…
